Lecciones aprendidas en los procesos de fortalecimiento organizacional con organizacionales que tienen un carácter étnico y cultural.

Abstract

El fortalecimiento psicosocial de capacidades institucionales, sociales y organizativas, es un proceso participativo y de acompañamiento realizado por la Corporación AVRE a organizaciones sociales y de derechos humanos, orientado a facilitar condiciones y capacidades psicosociales para la sostenibilidad de sus apuestas organizativas, en un contexto caracterizado por la emergencia política compleja(Pérez de Armiño, 2000). Es así, como se hace necesario que el quehacer profesional y los diferentes mandatos y formas de realizar el trabajo, realicen un análisis permanente para incorporar medidas que les permita tener en cuenta los impactos psicosociales y en la salud mental derivados del tipo de trabajo que desarrollan, sumados a la comprensión de que su acción se encuentra inserta en un contexto conflictivo y violento que puede aumentar la posibilidad de ocasionar mayores daños a las personas que acompañan, o a aquellas que se suman a la propuesta organizativa. Sin embargo, las capacidades sociales, organizativas e institucionales están enmarcadas en un contexto intercultural que implica ciertas maneras de respuesta y desarrollan su accionar a partir de sistemas de pensamiento que corresponden a culturas y condiciones particulares” (Uribe Ramón, Van Deventer, & Fernández, 2007). En este sentido, es necesario tener en cuenta que las dinámicas y capacidades organizativas y sus relaciones con otros sectores y apuestas, responden a procesos de configuración y reconfiguración social, a expresiones de pensamiento y posturas que se encuentran fuertemente ligadas a las maneras de pensar el conflicto, la paz y la violencia. Desde allí, la necesidad de identificar lecciones aprendidas en los procesos de fortalecimiento organizacional que ha realizado la Corporación AVRE con organizaciones que tienen un carácter étnico y cultural, apoyándose en el enfoque de acción sin daño y sensibilidad a los conflictos, que permitan reflexionar sobre la experiencia y considerar significados, comportamientos y dinámicas propias de las organizaciones, para reorientar y cualificar el trabajo que se viene desarrollando.